Blog

EL RITUAL DEL SECADO PERFECTO

El lavado de cabello es un proceso muy importante y delicado que las mujeres rizadas tratamos en cada paso. Pero el secado también es fundamental: ¿estamos seguros de que le damos la importancia que merece?

Un secado distraído no es sólo un pequeño descuido, que puede resolverse con la dosis correcta de gel: puede arruinar horas y horas de lavado, máscara, tratamientos variados y eventuales. Por eso debemos aprender cuál es el secado que mejor valora la singularidad de cada uno de nuestros rizos: para que todos nuestros esfuerzos hagan resplandecer lo mejor posible la belleza natural de nuestro cabello.

Los métodos de secado para el pelo rizado son 3, diversificados en función del efecto que se quiere obtener. El primero (y probablemente el más conocido) es el scrunching: utilizado para dar a los rizos definición y volumen, consiste en el "encoger" los mechónes de cabello con el palmo de la mano - ayudándose con una camiseta de algodón o una toalla en microfibra - haciendo un movimiento de abajo hacia arriba. Claro, se necesita paciencia; pero el resultado está asegurado.

Luego hay un método que corre especificamente en ayuda al cabello largo, del cual la pesantez estructural muchas veces arriesga dar ese fastidioso "efecto triangulo" dado por el aplanamiento de la melena en la parte mas cercana a la cabeza: se tratea del clipping, un proceso que consiste en dividir el cabello en pequeños mechones, meter unas pinzas a la raíz y secarlos utlizando el difusor. ¡Y ahí está! Tus rizos han vuelto a resplandecer en todo su volumen.

Y ultimo pero no meno importante, el simple per eficaz plopping: utilizando solamente una camiseta de algodón, se elimina cualquier rastro de efecto crespo y los rizos parecen suaves y definidos. Se necesita simplemente apoyar una camiseta en un plano horizontal (como la mesa o la cama), bajar la cabeza y acercarse lentamente, de modo que los rizos se enrollen sobre ellos mismos permaneciendo sobre la parte superior del cráneo; luego continuar enrollando las mangas de la camiseta para fijar un turbante alrededor de la cabeza, y dejar secar naturalmente el cabello. Si tienes prisa, en cambio, sólo tendrás que mantener el turbante unos veinte minutos, y completar el secado con secador y difusor.

Para concluir, un par de consejos que valen para cualquier método de secado (¡incluso la buena vieja pasada de secador de cabello!): preferir siempre un secador de pelo a los iones, que gracias a sus particulares propiedades hidrata aún más el cabello; mantener siempre un nivel de temperatura y de potencia del secador medio, para evitar traumatizar, secar o incluso "cocer" los rizos; secarlos siempre con el difusor y siempre boca abajo, para distribuir uniformemente el chorro de aire caliente y donar volumen a toda la longitud de la melena.